lunes, 20 de diciembre de 2010

Oceansize - Self-Preserved While The Bodies Float Up


(Superball Music, 2010)

Oceansize es de esas bandas que esconden un talento gigantesco. El sexteto británico a veces resulta mezquino, pues los derroches de rock progresivo parecieran extenderse ad infinitum cuando se trata de ellos. Parte de esto se apreció en su anterior EP, Home and Minor (2009, Superball), que distaba mucho del poderío de sus entregas anteriores. Hoy, con Self Preserved While The Bodies Float Up se bañan en furia e himnos otra vez. Los cambios de ritmo constantes, las distorsiones y riffs -que parecen sacados de un cuadro cubista- dan cuenta de su excelencia. Pocos logran hacer de un álbum un continente a explorar infatigablemente. Pasajes de post-rock, círculos espaciales y composiciones hechas para musicalizar escenas en cámara lenta. Así suenan ‘Oscar Acceptance Speech’ y la excelente ‘Silent/Transparent’. Oceansize se entrega, al fin, con todos sus colores.


Rolando Inostroza

Royal Baths: agujas en un pajar

Royal Baths no la han tenido fácil. Primero, por un forzado cambio de nombre de The Baths (para no ser confundidos con otra banda de igual denominación) y segundo, por el hogar de este proyecto: San Francisco. Una ciudad donde el garage rock reina, las bandas crecen como maleza y la esperanza de que el público local se fije en un grupo con baja publicidad, es mínima. A pesar de esto, con tracks de cuatro a seis minutos, letargo y beats precisos, este dúo ha sabido ganarse un lugar. Las claras influencias de The Velvet Undergound y Spacemen 3 y la oscura, personal y esotérica temática de sus canciones ha calado de a poco en los alrededores. Su debut Litanies, lanzado este año bajo el sello Woodsist, expresa que Jeremy Cox y Jigmae Baer van saliendo del crepúsculo del anonimato, pero sin dejar de oírse sombríos.


Rolando Inostroza

Suena como: The Velvet Underground, Crocodiles, Deerhunter

www.myspace.com/baths

Dead Confederate: dime con quién andas…

La historia de Dead Confederate emerge desde la escuela, con shows locales el 2006 en Athens, Georgia. Las cinco partes que conforman la banda hacen uso y abuso de un rock & roll impúdico, con influencias claras que van desde el grunge hasta el sonido clásico de los ‘70. Cuentan con dos largaduración, (Wrecking Ball de 2008 y el reciente Sugar) y dos epés (Dead Confederate de 2008 y Dirty Ammo al año siguiente), todos bajo el sello The Artist Organization. Registros que demuestran, a través de psicodelia y distorsión, que las giras con Meat Puppets y Dinosaur Jr. han calado fuerte en su arte. Esta conexión también puede observarse en su último trabajo, donde comparten el tema ‘Giving It All Away’ con J Mascis, líder de Dinosaur Jr. Sonido fresco, pero con la crudeza y oscuridad de hace 20 años.


Rolando Inostroza

Suena como: The Whigs, Film School, Nirvana

www.myspace.com/deadconfederate


Everything Everything - Man Alive


(Geffen, 2010)

El debut de Everything Everything suena fresco y perspicaz, así de simple. En la misma senda de bandas como Foals, Yeasayer y Minus The Bear, el cuarteto de Manchester se luce con sonidos accesibles, pero jamás básicos. Con estructuras y ritmos que ponen de cabeza cualquier pentagrama, Man Alive es una clase magistral de cómo hacer pop sin etiquetas. El espíritu del funk se cobija en un bajo lleno de matices, mientras la expresiva voz de Jonathan Higgs frasea y falsetea en una constante caja de Pandora musical. Eludir categorizaciones pareciera ser el objetivo, ponerle la tarea difícil a quien escucha, pero -a la vez- hacerlo reventar en bailes auditivos. De esta forma funciona ‘My KZ Ur BF’, tema que abre el disco. Su confianza rebosante sorprende en el contexto de un estreno. Es el camino que toma ‘Schoolin’, como si fuese juego de niños. Pop frontal, no convencional y hecho con clase. ¿Qué más se puede pedir?

Rolando Inostroza




Frankie Rose and The Outs - Frankie Rose and The Outs


(Sumberland, 2010)

Creativa compulsiva, Frankie Rose ha dejado su huella en Vivian Girls, Dum Dum Girls y Crystal Stilts. Saltando de banda en banda su nombre se ha repetido, mientras el éxito ha acompañado a los proyectos, otorgándole la categoría de supuesta Reina Midas tras sus aportes como baterista o bajista. Fantasía o no, lo que ahora nos trae junto a su propio grupo de chicas (The Outs), es literalmente dream pop y lo-fi encantador, lleno de pasajes sucios y sedosos. Acá la finura del reverb y el delay se mezcla con armonías vocales femeninas y el garage, homenajeando a ratos a las bandas de chicas de los ‘60. ‘Candy’ y ‘That’s What People Told Me’ rescatan lo más festivo del disco, mientras que ‘Hollow Life’ funciona como el arma perfecta para caer en brazos de Morfeo. Con misturas de ese tipo, Rose deja una sensación húmeda y sucia a la vez. Placentero por decir lo menos.


Rolando Inostroza

www.myspace.com/saintoftherose

Dinosaur Pile-Up - Growing Pains


(Friends vs. Records, 2010)

Despertar de golpe arriba de un montón de riffs, ésa es la actual consigna de Dinosaur Pile-Up. Con su primer LP bajo el brazo, dan cuenta de un gusto por los acordes de quinta, una agresiva distorsión y la intención de recordarnos por qué atesoramos con tantas ganas los primeros discos de Foo Fighters. El trío explota la potencia de un rock que resulta familiar por donde se le mire, pero que sigue siendo fresco cuando se quiere sudar y cantar algunos coros enérgicos. A pesar de toda esta primera impresión, Growing Pains figura como un previsible paso del excelente The Greatest EP in the Universe (2009), no logrando la misma sacudida final, pues las avasalladoras guitarras y trozos de algunos temas logran volverse un poco repetitivos en su estructura. Sin embargo, cuando las ganas están, discos como estos te llevan a practicar air guitar de forma inconciente.

Rolando Inostroza

Crocodiles - Sleep Forever


(Fat Possum, 2010)

“La muerte es parte de la vida”, ésa es la premisa de cajón cuando llega el momento. Son varias las formas de canalizar tamaña realidad para un ser humano, muchas; entre ellas la música y la religión. Dichosos como Crocodiles optan por la primera, dedicando un álbum completo al sueño eterno. Devotos de un shoegaze escabroso, con esta segunda entrega se alejan de la tensión que otorga el ruido, para hacer un trueque con el groove y líneas melódicas identificables. Sleep Forever trae una visible madurez, ya no hay que indagar entre los zumbidos, sólo dejarse llevar y flotar. Parte del plan maestro lo integra James Ford (Simian Mobile Disco), quien a cargo de las perillas abre una vía electrónica, punto cardinal del sonido actual del dúo. Lejos de morir, Charles Rowell y Brandon Welchez suben un peldaño y se quedan con nosotros por mucho tiempo más.

Rolando Inostroza